RiberEmprendedoras


Sobre el Proyecto

RiberEmprendedoras es un proyecto de visibilización de las mujeres emprendedoras de la Ribera del Duero Burgalesa, que forma parte de la Estrategia de Emprendimiento de la Mujer Rural de la Red PAME que se ha elaborado desde la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León (RED PAME), con la que se pretende empoderar a la mujer y promover su consolidación e impulso al empleo en el medio rural.

 

Aunque la Estrategia de Emprendimiento de la mujer rural engloba principalmente los ámbitos agrario y agroalimentario, desde la Red PAME de la Adri Ribera del Duero, queremos dar a conocer la labor, dedicación y esfuerzo de todas las mujeres emprendedoras rurales de todos los ámbitos que con su trabajo pueden servir de ejemplo para otras mujeres que como ellas quieran emprender en el medio rural. 

Nos basamos para ello en el análisis estratégico de Benchmarketing, es decir, tomando como referencia las buenas prácticas y experiencias de las mujeres emprendedoras de los ámbitos agrario y agroalimentario, vamos a ayudar a otras emprendedoras de otros ámbitos.


¿Quieres participar?

Buscamos dar visibilidad a tu proyecto, dar a conocer tus productos y servicios tanto en nuestra página web como en nuestras redes sociales. Para ello:

Necesitamos que nos cumplimentes  el siguiente cuestionario de inscripción que encontrarás en este enlace: https://forms.gle/wfuHtfmGKX3H19J29  necesario para participar en este proyecto de RiberEmprendedoras


Contacta con nosotros

Si quieres más información sobre este proyecto, así como del servicio de asesoramiento laboral y empresarial que hay en la Adri Ribera del Duero Burgalesa para las mujeres emprendedoras del medio rural puedes contactar con nosotros en el 947.55.20.91 o en el correo orientacion@riberadeldueroburgalesa.com

 


Entrevistas a mujeres emprendedoras

Marta Llorente

Es una emprendedora madrileña que a los 22 años se vino a vivir al medio rural y con 30 años empezó un proyecto agroganadero en Zazuar.

¿Quién es Marta?

Marta es una joven emprendedora madrileña qué desde los 16 años, tenía muy claro que quería vivir y trabajar en Zazuar, el pueblo de sus padres en el que veraneaba todos los años.

Sin embargo, no fue hasta los 22 años cuando una vez finalizados sus estudios de Administración y Finanzas, decidió dejar la capital y venirse a Zazuar, para además de estar con su pareja de toda la vida, también de Zazuar, empezar una nueva vida, la vida que tanto deseaba.

Alegre, risueña, con las cosas muy claras y muy apasionada con lo que hace. Transmite esa energía cuando te habla de su trabajo al que describe como “una satisfacción muy grande”

Esta emprendedora nata en noviembre hace cuatro años con su proyecto, una granja de cebo de porcino. Un sector difícil, casi inusual para una mujer, que está defendiendo a capa y espada con toda la ilusión del mundo. Con toda la ilusión que se tiene al emprender. Dice que es novata todavía, pero también reconoce que su interés y sus ganas hacen que cada día se aprenda más.

  1. ¿Qué te motivó emprender en un pueblo?

Vine cuando tenía 22 años cuando finalicé la carrera de Administración y Finanzas y enseguida empecé a trabajar en Aranda en una autoescuela, después como administrativo y finalmente como asesor de servicio en un taller de automoción. Nunca había trabajado de eso, pero poco a poco conseguí ponerme al día. Me quedé embarazada y me quedé sin trabajo. Mi marido por aquella época era autónomo y montaba ascensores por todo el norte de España, viajaba muchísimo. Al nacer mi hijo, mi pareja se planteó dejar su trabajo para no viajar tanto y decidimos quedarnos con las tierras de nuestros padres para empezar. Luego ya aumentamos un poco más nuestra explotación agrícola comprando alguna viña y arrendando alguna tierra y viñas más.

Un día de repente cayó en mis manos un folleto con información sobre cómo montar una granja de cerdos y la idea no se me quitaba de la cabeza. Nunca había trabajado de eso, ni me imaginaba trabajando de eso, pero mi marido y yo decidimos investigar el sector, y hablar con algunas empresas integradoras de cerdos. Tengo muchos recuerdos de esos momentos. El veterinario no paraba de decirme que no montase una granja de cerdos, pero después me acabó diciendo que si con todas las cosas malas que me decía yo seguía con mi idea, pues que lo tenía muy claro y que tirase para adelante, y ya llevo 4 años

2. ¿Es más duro emprender en el mundo rural? ¿Porqué?

No, yo no lo he tenido tan complicado. Más allá de las trabas burocráticas que son iguales en todos los sitios. No he tenido dificultades para emprender como mujer. Quizá si tengo que decir algo es que algún hombre (muy pocos) me ha comentado que quería comentar algún tema de la granja con mi marido y le he tenido que decir que la granja la llevo yo. Pero los menos casos.

3. ¿Qué ventajas has tenido al emprender en un pueblo?

Tengo más libertad que cuando vivía en Madrid. La conciliación es mucho más fácil. Aquí puedo disfrutar de mi familia, adapto mi trabajo a mi familia. En Zazuar tengo todos los servicios básicos cubiertos y Aranda me pilla cerca. Somos una gran familia. Si un día necesito trabajar por la tarde o por la noche siempre cuento con apoyo para dejar a mi hijo. Tengo el trabajo en la puerta de mi casa. Es un trabajo de lunes a domingo, pero el cebadero es la opción fácil de los cerdos. Hasta que aprenden a comer tengo que ir por la mañana y por la tarde, pero cuando aprenden ya sólo por la mañana, aunque muchas tardes vas a dar una vuelta. Cada ceba de lechones aproximadamente está 155 días en la granja desde que entran el primer día hasta que entra la siguiente ceba. Aunque la granja se queda en vacío sanitario una semana entre una ceba y la otra.

4. ¿Cuál ha sido lo más difícil a lo que has tenido que enfrentarte como emprendedora y cómo lo has conseguido superar?

El desconocimiento del cerdo fue un mundo. Antes de dar el paso definitivo para montar este proyecto le comenté al veterinario que quería ir a varias granjas para conocer de primera mano el trabajo diario. Yo me metía en el corral, y hacía el manejo de los animales. Entonces me di cuenta de que no era tan difícil como pensaba en un primer momento y dije pues adelante.

De hecho recuerdo que mi primer contacto en la granja fue cuando el veterinario me metió en un corral sola con 13 cerdos de 90kg cada uno….¡madre mía me quería morir!, pero no pasó nada.

Los primero días fueron más durillos, cuando me quedé sola con la primera ceba de 2000 lechones fue un mundo para mí porque no sabía qué hacer, no sabía cómo ver si estaban malos, o si les pasaba algo. Y el segundo día fue peor (risas), no paraba de llorar. Pero con el tiempo asimilé que no se puede aprender todo el primer día y que hay que ir poco a poco.

5. ¿Y cuál ha sido lo más fácil?

No sé qué decirte, es que salvo la burocracia todo lo demás ha sido fácil. He tenido ya 10 cebas, y las ganas hacen que cada vez quiera aprender más y más. Además, yo soy de las que pregunto todo, no me corto en eso, aunque al veterinario le pueda parecer una tontería.

6. ¿En qué consiste tu negocio o proyecto?

En noviembre hago cuatro años con la granja porcina, el campo lo lleva más mi marido. Aunque los dos trabajamos en equipo. Colaboramos en muchos momentos. Mi marido me ayuda a cargar animales, en invierno va los domingos a darles de comer para que yo me pueda dedicar a otras cosas. Y yo le ayudo en vendimias como tractorista, si tengo que ir a tirar abono, sembrar, ir a cortar el agua cuando se riega en verano.

7. ¿Qué hace especial tu negocio o proyecto que le haga destacar frente a los demás?

La calidad y la confianza con los clientes. Lo tenía claro desde el principio. Es algo por lo que nos queríamos distinguir. Yo quiero tener la mejor granja que tenga mi cliente. ¿Cuánto tardaré en conseguirlo?, no lo sé, pero sé que voy por el buen camino.

8. ¿Por qué decidiste dedicarte a eso, de dónde surgió la idea?

Fue el momento, como he dicho antes yo no tenía trabajo y cayó en mis manos un panfleto informativo sobre granjas porcinas, y me entró curiosidad, y hasta que poco a poco, pasito a pasito aquí estoy.

9. ¿Qué tipos de clientes tienes?

Nosotros tenemos clientes fijos desde hace ocho años, como te he comentado, la confianza vale mucho. En el caso de las viñas, siempre hay alguna bodega que quiere comprar nuestro producto. Tenemos viñas viejas, que sí que es verdad que cuestan más trabajo, pero es el tipo de viña que más nos gusta trabajar.

10. ¿Cuáles son tus objetivos a medio y/o largo plazo?

Ya los he cumplido, aunque si tengo que decirte algo te diré que diferenciarnos en calidad. Tengo una explotación importante, me gustaría crecer, pero con unos límites. Crecer para ser autosuficientes, para poder pagar las deudas y vivir mejor.

11. ¿Estás satisfecha con todo lo que has hecho o cambiarías algo?

Mucho. A día de hoy no cambiaría nada. No me dedicaría a otra cosa. Sé que hay problemas en el sector. He tenido costes altos. Estoy en el punto de mira de la opinión pública. Pero luego pienso y veo que me gusta lo que hago y estoy contenta. Las redes sociales a veces no ayudan y es complicado lidiar con eso algunos días. Para montar una granja porcina hay que tener las espaldas muy anchas y no tirar la toalla los días en que te dan ganas hacerlo.

12. ¿Qué consejos les darías a otras mujeres que tienen en mente emprender o están empezando con sus proyectos en el mundo rural?

Adelante. Da igual que sea en un pueblo. El que quiere puede hacer lo que sea donde sea. El medio rural sin ninguna duda no lo cambio por nada.


Elena Gónzalez

Esta emprendedora lidera un proyecto de ganadería avícola respetuoso con el medio ambiente en Campillo de Aranda

¿Quién es Elena?

En su momento estudió biología y se formó en gestión de ecosistemas. Siempre le ha apasionado el campo y tenía claro que quería trabajar en algo que me diese la posibilidad de desarrollar un proyecto diferente. No se imaginaba que fuesen a ser con gallinas, pero aquí está 😊

  1. ¿Qué te motivó emprender en un pueblo?

Después de una temporada trabajando en oficina y sin sentirme realmente realizada con mi trabajo y desconectada del campo. Decidí junto mi pareja volver al pueblo de mis antepasados e iniciar un proyecto de granja diferente.

2. ¿Es más duro emprender en el mundo rural? ¿Porqué?

Pues nunca he intentado emprender en la ciudad, así que realmente no puedo comprar un lugar con otro. Pero la falta de servicios, el necesitar mínimo un coche para cualquier cosa, los gastos que eso conlleva, tener que desplazarte para absolutamente todo, obviamente dificulta mucho las cosas y la conciliación.

3. ¿Qué ventajas has tenido al emprender en un pueblo?

Es emocionante saber que estas vinculado a la tierra de tus antepasados, revitalizar un poco el pueblo y sentir como todos se vuelcan en el proyecto y lo sienten suyo. Nos conocemos todos y siempre que lo hemos necesitado nos han tendido la mano, para lo que sea.

4. ¿Cuál ha sido lo más difícil a lo que has tenido que enfrentarte como emprendedora y cómo lo has conseguido superar?

Un proyecto pequeño implica muchas más cosas además del propio proyecto. Si todo fuese estar en la granja, diría que es trabajar en invierno con heladas o en pleno verano con su ola de calor y sin vacaciones. A veces te hace pensar que qué haces aquí, aunque los días de primavera con solecito y brisa fresca te dan la energía para todo el año. Pero yo diría que lo más complicado es todo lo que no es estrictamente de la granja. Ha habido que aprender de gestoría, a pelearnos con la burocracia, construcción, marketing, ventas, distribución, llevar las cuentas del negocio…

5. ¿Y cuál ha sido lo más fácil?

No sé si es lo más fácil, pero lo más placentero es pararte un momento entre tarea y tarea, mirar la granja y ver cómo poco a poco va evolucionando y ver que se va haciendo realidad la ilusión que plasmamos en algún momento en un papel.

6. ¿En qué consiste tu negocio o proyecto?

Granja Las Villanas es un proyecto de emprendimiento joven en Campillo de Aranda. Una pequeña granja de gallinas camperas que aspira a ser mucho más.

7. ¿Qué hace especial tu negocio o proyecto que le haga destacar frente a los demás?

Hemos creado en un año y medio todo por nosotros mismos. Transformando poco a poco una finca dedicada durante generaciones a agricultura intensiva en una pequeña granjita que esperemos llegue a ser mucho más que una granja de gallinas camperas. Queremos regenerar la finca poco a poco y plantearlo como un proyecto de granja polifacética, regenerar el suelo, crear plantaciones de frutales diversos y un huerto que nos ayude a complementar la dieta de nuestras gallinas.

8. ¿Por qué decidiste dedicarte a eso, de dónde surgió la idea?

Teníamos claro el dónde, pero no el qué. Empezamos a fantasear con la idea de una pequeña granja, fuimos a ver proyectos similares y poco a poco se fue forjando la idea.

9. ¿Qué tipos de clientes tienes?

Trabajamos con tiendas locales y particulares. Además, hacemos reparto a Madrid todas las semanas, donde tenemos alguna tienda y recientemente hemos habilitado la posibilidad de pedir nuestros huevos desde cualquier punto de la Península a través de la web.

10. ¿Cuáles son tus objetivos a medio y/o largo plazo?

Afianzar la viabilidad de la granja con la venta de huevos, plantación de más de 150 frutales este invierno y si todo va bien, centrarnos en la huerta para el próximo verano.

11. ¿Estás satisfecha con todo lo que has hecho o cambiarías algo?

Desde el punto de partida hasta donde estamos ahora hemos ido teniendo que amoldarnos e ir tomando decisiones que no siempre han sido fáciles. Empezamos con mucha ilusión y gracias a ello estamos aquí ahora, pero quizás nos faltó un poco más de formación, planificar las cosas y ojalá pudiésemos cambiar el incremento de costes y diversas crisis que se han ido sucediendo desde que empezamos. Pero quizás si hubiésemos hecho todo eso, ahora no estaríamos aquí y lo bonito de esto también es que nos lanzamos y aquí estamos. Luchando por nuestro sueño y superando retos día a día.

12. ¿Qué consejos les darías a otras mujeres que tienen en mente emprender o están empezando con sus proyectos en el mundo rural?

Que busquen otros proyectos similares que ya estén en marcha y en asociaciones de desarrollo rural como ADRI, que tejan redes y se apoyen en proyectos de la zona para crear sinergias. Es motivador hablar con personas que están desarrollando proyectos, da un chute de energía y siempre aprendes algo nuevo.


Verónica Diosdado

Es una emprendedora que forma parte de un proyecto de guía de naturaleza, micología y espeleología y como hobbies se dedica a la artesanía.

¿Quién es Verónica?

Verónica es Técnica Superior en Gestión Forestal y del Medio Natural aunque entre semana se dedica a otras cosas como la albañilería con su pareja, el turismo activo de Pedrete Guiados donde dentro de ella soy la guía de naturaleza, micología y en ocasiones de espeleología, y la artesanía, a día de hoy uno de sus grandes hobbies.

Apasionada de la naturaleza, los animales y las plantas. Transmite en todo lo que hace su pasión por el entorno. Desde hace más de un año forma parte de la empresa ArtHebe, Pedrete Guiados y Construcciones Pedro Carazo.

ArtHebe también tiene un significado especial. Art de arte y Hebe es nombre científico de una de las plantas de nombre común llamadas Verónicas. Pero ArtHebe es mucho más. No sólo es pasión. En cada cosa que talla se deja un pedacito de su corazón. Cada cosa que hace tiene una historia propia. Tiene un nombre. Es algo que no se puede explicar con palabras cuando escuchas a Verónica hablar. Es polivalente y muy luchadora. Para ella emprender en el medio rural ha sido un regalo. Tiene a su alcance todo lo que necesita.

  1. ¿Qué te motivó emprender en un pueblo?

Yo soy de Vertavillo un pueblo pequeño del Cerrato Palentino. Me apasiona la vida rural, no soporto la ciudad ni los pueblos grandes. Por eso no me ha sido difícil emprender en un pueblo. Vine a Coruña del Conde en el año 2020, me gustó la zona, conocí a mi pareja y me quedé. Quiero seguir sintiendo esa tranquilidad y contacto con la naturaleza.

2. ¿Es más duro emprender en el mundo rural? ¿Porqué?

Es una ciudad, por ejemplo, si abres una tienda por el volumen de gente que vive allí puedes llegar a más gente. Eso en el pueblo no pasa. Pero ahora con las tecnologías y las redes sociales puedes tener más visibilidad desde cualquier parte del mundo. Siempre y cuando te sepas manejar con ellas, que para mí es lo más duro y es mi asignatura pendiente.

3. ¿Qué ventajas has tenido al emprender en un pueblo?

La tranquilidad del entorno rural y el contacto con la naturaleza.

4. ¿Cuál ha sido lo más difícil a lo que has tenido que enfrentarte como emprendedora y cómo lo has conseguido superar?

Vender por internet y redes sociales. Mi trabajo requiere muchas horas de talla y eso me deja poco tiempo para ocuparme de otras cosas como puede ser la tecnología. Como he dicho antes es mi asignatura pendiente y sé que hoy en día es algo necesario.

5. ¿Y cuál ha sido lo más fácil?

Lo más fácil es tallar las cuernas de corzo o ciervo. Es algo muy laborioso. Darle volumen y realismo no es fácil, no conozco a nadie que haga lo que hago yo. Hago cosas por encargo, es decir, soy capaz de hacer cosas que la gente quiere y me pide. Por ejemplo, navajas, llaveros, colgantes, pendientes personalizados. Los que me conocen y compran algo siempre repiten. Hago mascotas, escenas de caza, setas, aficiones, logos de empresa, lámparas

6. ¿En qué consiste tu negocio o proyecto?

Transformo cuernas de corzo, ciervo y gamo, procedentes de desmogue. Son cuernas que se les cae cada año de manera natural para crecerles una nueva. Yo las compro a una empresa y las transformo. Las desbasto y tallo hasta conseguir lo que quiero o lo que tengo en mente. Es un trabajo tedioso, necesito estar muy tranquila y concentrada y precisa buena vista por lo que es imprescindible la luz natural. Como he comentado antes soy capaz de hacer de todo, cualquier cosa que me pidan. Lo último que he hecho ha sido un belén para unos señores mayores que coleccionan belenes, los coleccionan del todo el mundo y de muchos artistas y escultores y los ponen en dos museos de Burgos. Nunca había tallado humanos. En el mundo de la talla lo más sencillo es lo geométrico, luego el mundo vegetal, después, el mundo animal, y el más complejo es el mundo humano. No me había atrevido nunca, pero me hicieron un encargo y decidí que era el momento. Es una pasada. Otra cosa curiosa que me han mandado tallar es un ascensor, pero convencí al cliente para que le regalará otra cosa a su amigo, otra talla diferente. El tema es que su amigo siempre había trabajado arreglando ascensores y ese año se jubilaba, por eso le aconsejé otra cosa. Eso es otra de las cosas que hago, escuchar y aconsejar en base a lo que me van diciendo que necesitan. Es fundamental que me cuenten la historia, por qué quieren que les talle lo que me han pedido para que yo me pueda inspirar.

7. ¿Qué hace especial tu negocio o proyecto que le haga destacar frente a los demás?

Es único, son piezas únicas. Es una mezcla de arte y sentimientos. Es una mezcla de arte y aficiones. Y todas ellas plasmadas de una manera que es eterna. Son sentimientos plasmados en un llavero, navaja, colgante que los puedes llevar siempre. Todo lo que hago es eterno. No se rompe fácilmente. Es un material muy duro.

8. ¿Por qué decidiste dedicarte a eso, de dónde surgió la idea?

Siempre me ha apasionado la artesanía. Me suegro me regaló por mi cumpleaños la herramienta necesaria y como hobby empecé haciendo regalos a mi familia y a mis amigos. Comencé con una navaja a mi sobrino para que fuese a coger secas y le talle un pajarito porque le gustan mucho las aves. La gente me empezó a decir que les gustaba, y así comencé. Publiqué en Facebook, y poco a poco me llegaron más encargos.

9. ¿Qué tipos de clientes tienes?

De todo tipo. Animalistas, apasionados de la naturaleza, ornitólogos, cazadores, familias, empresas, cumpleaños, de todo tipo

10. ¿Cuáles son tus objetivos a medio y/o largo plazo?

Mi trabajo es muy duro, está muy poco valorado en general. Son muchas horas de trabajo, mucho esfuerzo. A veces me planteo que no merece la pena. De la artesanía en estos momentos, no vivo. Me encanta lo que hago, pero no me reporta muchos beneficios. ¿Mis objetivos?. Voy probando. Este año me dediqué sin éxito a ferias medievales y de artesanía. Quiero probar otro tipo de ferias para dar visibilidad a lo que hago.

11. ¿Estás satisfecha con todo lo que has hecho o cambiarías algo?

Hago todo lo que puedo, así que sí estoy satisfecha, aunque me gustaría tener más ventas y poder vivir de lo que hago, que es una de las cosas que me gusta y sé que lo hago bien. Aunque todo es mejorable y me quedan cosas por aprender. Muchas cosas. ¿qué cambiaría? El que me gustase más la tecnología y las redes sociales. Tampoco quiero que me gusten mucho (ríe), sólo lo necesario para poder darme a conocer.

12. ¿Qué consejos les darías a otras mujeres que tienen en mente emprender o están empezando con sus proyectos en el mundo rural?

El medio rural como calidad de vida, para mí es lo mejor. Poder tener un negocio en lugar así es un lujo. Depende de a lo que quieran dedicarse les diría una cosa o les diría otra. Mi consejo es que si tienen un sueño lo prueben. Lo intenten. Tal y como hice yo. Luego poco a poco te vas adaptando a las circunstancias y vas aprendiendo.



Alba Frutos

Es una emprendedora que volvió a su pueblo, Roa de Duero, para dedicarse a la viticultura y enología, pero también tiene un apartamento turístico y hace catas de vino.

¿Quién es Alba?

Alba es una emprendedora que se define entusiasta de profesión, porque no hay nada que le identifique más que la actitud con la que se enfrentó a los desafíos que se le presentan, tanto personales como profesionales.

Estudió ADE en Salamanca, y pese a dedicarse casi 4 años al mundo de la banca siempre supo que antes o después su camino pasaba por volver al mundo rural.

Es una enamorada del mundo del vino, y tiene la suerte de poder dedicarme a ello. A parte de esto, le encanta viajar, la fotografía y divulgar contenido en redes sociales, siempre ligado al mundo del vino, cree que, además, el trabajo en redes, lucha contra los estereotipos arraigados de lo rural, y las personas que se quedan en los pueblos, más aun siendo mujer.

A parte de su trabajo con viticultora y enóloga, recientemente ha puesto en marcha un apartamento turístico en Roa, y además, cada 15 días hace catas que acerquen el mundo del vino a todos los públicos, desde vinos del penedés a blancos de Galicia pasando por olorosos de jerez y vinos internacionales. Esta actividad la desarrollo en Guzmán, donde ha encontrado otra mujer emprendedora, Helena con ganas de dinamizar su pueblo con actividades como esta. 

  1. ¿Qué te motivó emprender en un pueblo?

Cuando me fui de aquí siempre supe que volvería, lo que no sabía era en qué circunstancias. En el mundo rural hay pocas opciones que no pasen por el emprendimiento, y, a mi forma de entender la vida, los referentes que me preceden y mi culo inquieto, mi proyecto de vida pasa por emprender.

2. ¿Es más duro emprender en el mundo rural? ¿Porqué?

Si, lo primero porque los recursos son limitados, al igual que el público objetivo. Cuando emprendes en el medio rural, tienes que tener un plan de negocio con los pies en la tierra.

Además, cuando emprendes en el medio rural hay que tener en cuenta que ligas tu futuro a esta zona, y también se tiene en cuenta las sevicias que cada vez se ven más mermados, carreteras y logística, sanidad, educación etc etc.

3. ¿Qué ventajas has tenido al emprender en un pueblo?

Si que es cierto que por el tipo de emprendimiento he tenido ayudas y subvenciones que no podría haber conseguido en una ciudad, si bien es cierto que los tramites son largos y tortuosos.

4. ¿Cuál ha sido lo más difícil a lo que has tenido que enfrentarte como emprendedora y cómo lo has conseguido superar?

Lo que peor llevaba al empezar mi proyecto era esa sensación de tener que estar demostrando a todo el mundo que podía hacerlo, y enfrentarme a comentarios machistas sobre la mujer y el campo, y perdía mucha energía explicando que mujeres como mi abuela dieron forma a la ribera del Duero, ahora ya nadie me cuestiona, pero al empezar notaba que ponían un foco en mi que si fuese hombre no hubiese tenido.

Por otro lado, las necesidades de financiación, empezar una empresa agraria es, como digo yo, echar dinero a un pozo y esperar que un día vuelva, la inversión empezó el primer día y 5 años después, acaban de entrar en producción mis primeras viñas plantadas, por lo que, esa espera, y el sobrevivir económicamente mientras esperas es duro, lo solvente con las actividades de catas y la financiación externa a la que tuve que convencer sobremanera de la viabilidad de mi proyecto.

5. ¿Y cuál ha sido lo más fácil?

Uf.. fácil como tal creo que no hay nada, todo requiere mucho trabajo esfuerzo y sacrificio, ahora es cuando el camino está empezando a allanarse, una vez que empieza a estar todo en funcionamiento.

6. ¿En qué consiste tu negocio o proyecto?

Por un lado, tengo una explotación vitícola de 10 hectáreas que he plantado en 2020 y 2021. Las variedades elegidas: tempranillo, albillo y riesling. Por otro lado, dirijo Bodegas y Viñedos Frutos Aragón me formé en enología viticultura y cata profesional y actualmente soy enóloga, bodeguera y en general todóloga de la empresa. Es una empresa familiar levantada sobre un esfuerzo titánico por parte de mis padres y, ahora que ellos ya han dado un paso atrás, yo lo di hacia delante y con mucho esfuerzo, hemos crecido en los últimos años, tanto en producción como en la elaboración de vinos nuevos. A su vez tenemos un proyecto de enoturismo que se complementa con el apartamento turístico que he montado en el centro de Roa.

7. ¿Qué hace especial tu negocio o proyecto que le haga destacar frente a los demás?

A parte de apostar por la zona elaboramos vinos diferentes, con variedades que van más allá del tempranillo, elaboramos rosado fermentado en frío con lías y en los próximos años se incorporaran vinos blancos.

En cuanto al enoturismo ofrecemos visitas diferentes muy personalizadas, con catas y talleres de cocteles con vino como vitonic o mojito de rosado, o catas en viñedo, que acerca el vino incluso a aquellos que no lo beben habitualmente con el fin de, en la medida de lo posible rejuvenecer la edad de consumo de vino y darle todas las posibilidades que tiene. En cuanto a redes sociales, somos dinámicos y enseñamos con un lenguaje sencillo todos los procesos de vino y de campo a fin de que la gente pueda acercarse al mundo del vino de una manera didáctica y sencilla.

8. ¿Por qué decidiste dedicarte a eso, de dónde surgió la idea?

Vengo de una familia con tradición emprendedora, desde mis abuelas que emigraron para buscarse la vida, a mis padres que montaron varias empresas en diferentes sectores a lo largo de su vida, pero siempre ligadas al mundo rural .La decisión de plantar viñedo era lo más lógico dado el conocimiento que ya tenía del medio por haber «nacido entre viñedos´´ (mis padres llevan más de 35 años dedicándose a la viticultura, tanto con viñedos propios como con una empresa de servicios a viñedo).

En cuanto al apartamento turístico, nació de la poca oferta de la zona en alojamiento y la gran demanda que yo veía por parte de mis visitantes y teniendo en cuenta cuánto dinero desviaba a otros alojamientos que estaban mucho más lejos o en una zona menos céntrica de la Ribera del Duero.

9. ¿Qué tipos de clientes tienes?

La bodega tiene clientes muy diferentes, si es cierto que los clientes más fieles que tengo surgieron de las redes sociales, y se fidelizaron a través de las visitas y del trato personalizado. Casi todos vienen a visitarnos una vez al año, traen a familiares y amigos y se genera una confianza y un vínculo muy estrecho con ellos, lo que hace que, casi cualquier producto nuevo que saquemos estén dispuestos a probarlo.

10. ¿Cuáles son tus objetivos a medio y/o largo plazo?

Los objetivos a medio y largo plazo sería aumentar producción y ventas con nuestra marca y empezar a trabajar en vinos blancos.

11. ¿Estás satisfecha con todo lo que has hecho o cambiarías algo?

Estoy satisfecha con lo que he hecho, ha sido un camino largo, pero los pasos que fui dando eran firmes. No cambiaria nada porque no sé qué resultado tendría ese cambio, se que estoy en un punto en el que poco a poco todos los objetivos que voy teniendo se van cumpliendo por lo que no tengo la sensación de haber hecho algo mal en el proceso.

12. ¿Qué consejos les darías a otras mujeres que tienen en mente emprender o están empezando con sus proyectos en el mundo rural?

Que lo intenten, que el mundo rural tiene mucho que ofrecer a aquellas personas que se arriesgan y que apuestan por él, que no va a ser fácil pero que merece la pena. Que van a invertir no sólo en un negocio también en calidad de vida y que, la supervivencia del mundo rural pasa por nosotras y pasa por el emprendimiento, que no decaigan y hacia delante.


Máxima Crespo

Esta emprendedora gestiona alojamientos turísticos en Vadocondes, y está al frente como secretaria, de la Asociación Ancyco

¿Quién es Máxima?

Es una emprendedora todoterreno que gestiona alojamientos turísticos (La Ren Lecrés y Apartamentos Turísticos Las Escuelas), uno de ellos La Ren Lecrés premiada como Mejor Casa Rural de 2021 por la plataforma Ruralka, que engloba a mas de 200 hoteles del medio rural en España, Colombia y México. Es secretaria de la Asociación Ancyco, una Asociación que promueve espacios de coliving y coworking en las zonas rurales siempre desde un enfoque de modelo turístico. Además, está al frente de Co-creando proyecto Rural Thinking.

  1. ¿Qué te motivó emprender en un pueblo?

Tras más de 30 años de experiencia profesional en gestión tanto en multinacional como en pymes, y habiendo trabajado en distintas ciudades Valladolid, Londres, Madrid, Burgos y los últimos 17 años en Aranda llevando la gestión de una bodega,  tras el confinamiento me di cuenta que necesitaba un cambio que me permitiese una mayor disponibilidad de mi tiempo y una mayor libertad para desarrollarme libremente como profesional independiente,  fue el motivo que me llevo a valorar mis recursos buscando opciones que me permitiesen ofrecer una alternativa de valor. Los últimos 10 años había vivido en el pueblo sintiéndome afortunada por disponer de un espacio creado para vivir en familia tranquilo, con huerto, jardín, etc… donde se disfrutan los encuentros.

Compartir nuestra casa y la forma de vivir el pueblo fue lo que me motivo a emprender poniendo en funcionamiento el alojamiento en un entorno rural.

2. ¿Es más duro emprender en el mundo rural? ¿Porqué?

Considero tiene ventajas e inconvenientes, al final si desean emprender pones al alcance todos los medios y recursos de los que dispones y adelante.

No es fácil encontrar servicios para complementarte o ayudarte. Te obliga a ser más autónomo.

3. ¿Cuál ha sido lo más difícil a lo que has tenido que enfrentarte como emprendedora y cómo lo has conseguido superar?

He puesto mi casa en funcionamiento en alquiler turísticos sin tener en cuenta las opiniones ajenas del pueblo y con recursos propios.

Las posibilidades de asociase con empresas afines o personas logísticamente es más complicado, en mi caso acudo mucho al online.

4. ¿Y cuál ha sido lo más fácil?

Tengo una gran experiencia en distintos sectores de empresas y eso me da seguridad a la hora de gestionar, soy muy practica y me apoyo mucho en la digitalización y la comunicación.

5. ¿En qué consiste tu negocio o proyecto?

Desde hace dos años gestiono una finca de 2 alojamientos turístico lo que ha sido mi vivienda familiar y desde hace un año también gestiono dos apartamentos turísticos propiedad del ayuntamiento de Vadocondes.  

6. ¿Qué hace especial tu negocio o proyecto que le haga destacar frente a los demás?

Todos los alojamientos son especiales, La Ren Lecrés es un concepto más moderno un espacio amplio tanto interior como exterior con una decoración muy pensada para disfrutar del espacio con las piezas justa todas ellas de calidad y de materiales nobles.

Que junto al jardín un espacio amplio con plantas verdes todo el año, su piscina, huerto hacen un espacio ideal para reunirse, familiares, amigos o compañeros de trabajo.

Los apartamentos Las Escuelas han sido redecorados para hacer honor a lo que fueron se han rescatado pupitres, mapas mundo, .. son honestos y acogedores.

7. ¿Por qué decidiste dedicarte a eso, de dónde surgió la idea?

Durante los años que ha sido nuestra vivienda fue la sede de la familia (abuelos, primos,…) y recibimos la visita de multitud de amigos muchos de ellos internacionales, viendo la acogida y el bienestar que causaba en ellos nos hizo decidirnos a alquilarla a nivel turístico.

8. ¿Qué tipos de clientes tienes?

Principalmente familias jóvenes o grupo de amigos con niños.

9. ¿Cuáles son tus objetivos a medio y/o largo plazo?

Seguir apostando por alojamientos que ofrezca calidad, diseño y cercanía, una invitación a vivir el pueblo desde un enfoque abierto y moderno, soy anfitriona global con experiencia a nivel internacional.

Facilitar servicios de los que el pueblo no dispone para mejorar la experiencia al usuario.

Buscar un nicho de mercado empresa para encuentros entre semana, como espacio de coworking.

10. ¿Estás satisfecha con todo lo que has hecho o cambiarías algo?

Estoy muy satisfecha por lo conseguido en un breve periodo de tiempo y considero que tengo mucho más que ofrecer seguiré avanzando. La idea es complementarme con servicios de calidad si fuera posible con profesionales de la zona.

11. ¿Qué consejos les darías a otras mujeres que tienen en mente emprender o están empezando con sus proyectos en el mundo rural?

Es un viaje bonito a la vez que complicado, que se lancen si ya disponen de experiencia y saben en el sector al que se enfrentan, de carecer de experiencia aconsejo ser cauto en inversiones que no sean fáciles de rentabilizar y comenzar con el mínimo producto viable y paso a paso.


NEREA ALONSO

Esta emprendedora gestiona una casa rural «Casa Rural las Bodegas» en Nava de Roa, un negocio que compagina con su familia

¿Quién es Nerea?

Es una emprendedora que le encanta vivir en el medio rural y disfrutar de todo lo que le ofrece, entre algunas de esas cosas la naturaleza. Trabajaba en Aranda de Duero y cuando formó una familia decidió poner en marcha su propio negocio en su pueblo, una casa rural «Casa Rural Las Bodegas» en Nava de Roa.

  1. ¿Qué te motivó emprender en un pueblo?

Fueron varias cosas, por un lado poder compaginar mi puesto de trabajo con cuidar y disfrutar de mis hijos, y por otro lado dar a conocer a toda la gente que viene a la casa rural lo bien que se está y se vive en un pueblo.

2. ¿Es más duro emprender en el mundo rural? ¿Porqué?

Yo creo que da igual dónde quieras emprender, a mi lo que más me ha dificultado emprender es todo el tema administrativo, toda la burocracia, toda la documentación que hay que hacer y preparar hasta que tienes el negocio montado. Y ese inconveniente es más grande si encima no entiendes de todas estas cosas. Yo tengo que dar las gracias al Alcalde y la secretaria de mi pueblo que me han ayudado. Hay muchas personas que tienen sueños pero que al final por tanto papeleo se echan para atrás.

3. ¿Qué ventajas has tenido al emprender en un pueblo?

Pues no sabría qué decir, quizá el que todo está más cerca y qué todo el mundo te conoce y es más fácil que te ayuden si lo necesitas.

4. ¿Cuál ha sido lo más difícil a lo que has tenido que enfrentarte como emprendedora y cómo lo has conseguido superar?

Vuelvo con lo mismo pero para mí lo más difícil fue el tema de la documentación que hay que tramitar, que dando paseos a un lado y a otro al final lo haces pero tocando muchas puertas.

5. ¿Y cuál ha sido lo más fácil?

Reformar y decorar la casa. Cada paso que daba, cuándo veía cómo iba quedando la ilusión era mucho mayor. tenía ganas de terminarla y mucha ilusión porque funcione bien.

6. ¿En qué consiste tu negocio o proyecto?

Es una casa rural para 12 personas. Consta de un amplío salón con chimenea para los días de invierno y un enorme patio con piscina, césped, barbacoa y mobiliario de jardín para los días más calurosos de verano.

7. ¿Qué hace especial tu negocio o proyecto que le haga destacar frente a los demás?

No puedo comparar mi casa con otra otra casa rural porque cada casa rural tiene su encanto. Para mi es especial porque la he hecho con todo el cariño del mundo y a día de hoy es mi negocio y me medio de vida y estoy muy feliz de que sea en Nava de Roa.

8. ¿Por qué decidiste dedicarte a eso, de dónde surgió la idea?

La idea surgió porque nosotros solíamos ir de casa rural una vez al año y cómo tuve que dejar mi trabajo porque quería cuidar a mis hijos pensamos que podría ser una buena oportunidad para seguir trabajando y a la vez poder estar con mis hijos que era lo que yo quería. Al principio, te surgen dudas y miedos, pero gracias al apoyo de mi marido todo fue mucho más fácil.

9. ¿Qué tipos de clientes tienes?

De todo tipo: amigos que vienen a visitar bodegas, familias con bebés, etc

10. ¿Cuáles son tus objetivos a medio y/o largo plazo?

Que poco a poco vaya funcionando, de momento no pido más.

11. ¿Estás satisfecha con todo lo que has hecho o cambiarías algo?

Si, estoy contenta, satisfecha y feliz.

12. ¿Qué consejos les darías a otras mujeres que tienen en mente emprender o están empezando con sus proyectos en el mundo rural?

Que con paciencia y con mucha ilusión todo se consigue.